- El aumento de la jefatura femenina en hogares con niños pequeños, pasó del 45% al 75%, especialmente en los estratos 1 y 2.
- La secretaria de Inclusión Social, Sandra Sánchez, afirmó que desde la Administración ya se están haciendo los ajustes que exige el momento actual.
Con motivo de la conmemoración de los Derechos de los Niños y Niñas, el Concejo de Medellín abrió sus puertas a los verdaderos protagonistas: niños, niñas y adolescentes que, por un día, asumieron el rol de voceros para expresar sus preocupaciones, propuestas y sueños.
Entre las reflexiones presentadas por los menores, insistieron en la importancia de ser escuchados en la escuela y la comunidad, y plantearon una propuesta concreta: fortalecer la educación sobre los cambios físicos y mentales que atraviesan durante su crecimiento. «Queremos sentirnos acompañados, no juzgados», dijo una de las adolescentes presentes, con la convicción de quien sabe que su voz merece ser tenida en cuenta.
Durante el encuentro, expertos de diversas entidades presentes como la Fundación Éxito y la Fundación Carla Cristina alertaron sobre desafíos que comprometen el futuro de la ciudad. El 85% del desarrollo cerebral ocurre en los tres primeros años de vida, por lo que garantizar una nutrición adecuada y atención integral en la primera infancia no es solo una prioridad, es una urgencia.
A esto se suma un fenómeno silencioso pero decisivo y es la realidad de que Medellín envejece, evidenciando que para 2060 la pirámide poblacional se invertirá. En 2005, los menores de cinco años representaban el 9% de la población, hoy son apenas el 6%; una cifra que, aunque parezca mínima, transforma la estructura social y obliga a repensar las políticas públicas.
Otro dato revelador es el aumento de la jefatura femenina en hogares con niños pequeños, que pasó del 45% al 75%, especialmente en los estratos 1 y 2. Esto pone en evidencia los altos niveles de vulnerabilidad que enfrenta esta población, que en muchas ocasiones carga sola con la crianza.
La violencia también golpea con fuerza. En Medellín, entre enero y febrero, dos menores fueron víctimas de homicidio, 13 murieron en eventos de transporte, dos por accidentes y dos por suicidios. Los delitos no fatales también alarman: 73 casos de abuso sexual, 59 de violencia interpersonal, 47 de violencia intrafamiliar, además de múltiples lesiones por accidentes y transporte.
Al respecto, la concejala Paulina Suárez, vocera de esta invitación, hizo un llamado a seguir construyendo entornos protectores y sembrar esperanza en la infancia ya que ellos son el futuro de la ciudad.
Por su parte, la corporada Janeth Hurtado, también vocera, valoró el impacto de la iniciativa, destacando que permitió una mayor cercanía y la garantía de que las voces de los niños sean escuchadas. Además, seguir dando pasos firmes en su protección, ligado a espacios seguros.
Ambas Cabildantes anunciaron que radicarán un proyecto de acuerdo para institucionalizar el Día del Niño, Niña y Adolescente Concejalito en el municipio de Medellín, como una forma de reafirmar el compromiso con sus derechos y su participación activa.
Igualmente, el también vocero, concejal Miguel Iguarán, señaló que es fundamental garantizar a los menores una formación en entornos seguros y apoyarlos para que cumplan sus sueños. Indicó que esta tarea no debe recaer únicamente en la Alcaldía, sino que debe comenzar desde las familias, quienes tienen un papel esencial en velar por la protección y el cumplimiento de los derechos de los niños.
Frente a esta realidad, la secretaria de Inclusión Social, Sandra Sánchez, afirmó que desde la Administración ya se están haciendo los ajustes que exige el momento actual, asumiendo la responsabilidad con las familias, los colegios y los niños.
Bajo la misma línea, Diana María Carmona, directora de Buen Comienzo, destacó que hoy se trabaja directamente con los menores, haciéndolos parte activa de los proyectos y de la construcción del Plan de Desarrollo a través del arte y la lúdica, como herramientas para expresar cómo sueñan la ciudad.
En consonancia, expertos agregaron que, en términos de pobreza multidimensional, Santa Elena (27%), Santa Cruz (21%), Villa Hermosa (20%), Popular Uno (19%), Manrique y Robledo (17%) encabezan las cifras como los sectores donde la infancia vive en condiciones que requieren atención urgente.
La educación también enfrenta desafíos. Aunque la cobertura neta en primaria alcanza el 94%, la meta establecida por los Objetivos de Desarrollo Sostenible para 2020 era del 100%, y no se cumplió.
De acuerdo a sus intervenciones, la situación se agrava en secundaria, donde 13.414 niños y adolescentes han desertado. Entre las causas se encuentran la falta de documentación, el embarazo adolescente y la falta de atención a trastornos del aprendizaje.
La jornada dejó claro un mensaje urgente: los menores piden más protección, participación, comprensión y espacios seguros en su entorno cotidiano que garanticen su desarrollo y el cumplimiento de sus proyectos de vida.








